El huevo es uno de los alimentos más ricos, básico en una buena alimentación, con un alto contenido de nutrientes. Además se puede preparar de mil y una maneras. Pero no todos los huevos son iguales, es la forma de criar de las gallinas la que determina qué tipo de huevo es.
Nuestros huevos son huevos camperos, es decir, huevos que provienen de gallinas criadas en libertad.
La diferencia fundamental del huevo campero respecto del huevo convencional es que las gallinas camperas pueden salir del gallinero al aire libre para andar y picotear hierbas y son gallinas relajadas y sin estrés, mientras que las gallinas del huevo convencional viven encerradas en jaulas con espacios muy reducidos sin apenas movilidad y con falta de luz solar, lo que les genera un gran estrés.
También se diferencian en la alimentación. Nuestras gallinas son alimentadas con piensos a base cereales, maíz y soja.
Todo esto repercute en la calidad del huevo que ponen y por ello nuestros huevos son unos huevos COJONUDOS.
Según la legislación Europea, los huevos que se destinan al consumo humano deben ir marcados con un código alfanumérico en la cáscara que identifica el tipo de huevo del que se trata en función del sistema de cría de las gallinas ponedoras.
Para distinguir correctamente el tipo de huevo que adquirimos no basta con que en el envase se haga referencia a “camperos” o “ecológicos”, debemos fijarnos en el inicio del código alfanumérico que llevan impreso. Así, si ese dígito es:
Por tanto, los huevos camperos deberán llevar impreso un código que empiece por 1.
El resto de dígitos de ese código indican lo siguiente:
Ofrecemos huevos camperos de la mejor calidad en envases tanto de media docena como de docena. También ofrecemos cartones de 30 uds.